Este es un espacio holístico donde podrás encontrar artículos d
e información diversa relacionados con las terapias naturales, la nutrición, las técnicas manuales, psique y emociones, todo destinado a poder conseguir un mejor conocimiento de nuestro ser, un mayor acercamiento a la naturaleza, buscando la finalidad de sentirnos en equilibrio.


19 de abril de 2016

Botiquín de hierbas

Tenemos a nuestro alcance una extensa variedad de plantas medicinales que, desde los
albores de la humanidad, utilizamos para tratar todo tipo de dolencias de urgencia.

Dada la necesidad de sintetizar contenido y no por ello, restarle importancia a las hierbas omitidas, me inclino a escoger estas 10 plantas clásicas y populares para la elaboración de un botiquín herbario casero.

Podemos encontrarlas facilmente en el Herbolario en sus diferentes presentaciones; para uso interno hoja seca (infusión), fresca, extracto líquido, polvo, comprimido) y para uso externo (infusión,crema, tónico, aceite).

Aloe Aloe vera: Tónico estomacal, úlcera gástrointestinal, mejora la digestión de las proteínas, estreñimiento crónico. Astringente, antibiótico y cicatrizante, su  uso externo  en problemas de piel (herpes, quemaduras, psoriasis, acné, pequeñas heridas). No uso interno en embarazo, lactancia, obstrucción vias biliares.
Árbol del Té Melaleuca alternifolia: Antibiótico y cicatrizante. Uso externo (picaduras insectos, abcesos, aftas, úlceras, heridas, hongos piel /uñas, pie atleta, acné, piojos). Precaución embarazo, lactancia
Árnica Árnica montana: Antiinflamatorio. Uso externo para hematomas, contusiones, lesiones musculares y articulares, forúnculos, úlceras, picaduras. No embarazadas, lactancia, pieles muy sensibles.

Diente de León Taraxacum officinale: Desintoxicante, depurativo hepato-biliar y renal (alteraciones digestivas, cálculos biliares, cálculos renales, hígado tóxico, retención líqidos), falta de apetito, estreñimiento. Precaución embarazo, obstrucción vias biliares.
Equinácea Echinacea purpurea Estimulante inmunitario, antibiótico, antiviral, gripe, afecciones garganta, infecciones genitourinarias, diarreas. Uso externo como antiséptico en llagas y úlceras supuradas, eczema, acné, psoriasis, artritis. No prolongar el tratamiento más de dos meses. No embarazo, lactancia, hepatopatías.
Jengibre Zingiber officinale: Indigestión, gases, náuseas, vómitos, cólicos, salmonelosis. Resfriado común (fluidifica moco) bronquitis. Analgésico (dolor menstrual, dolor reumático y muscutar, migraña, mareo). Precaución embarazo, lactancia.
Manzanilla Matricaria chamomilla: Digestiva, acidez, gastritis, flatulencias, 
diarrea, dolor menstrual. Sedante y analgésica, ansiedad, insomnio. Uso externo en conjuntivitis, lavados intestinales, vaginales, garganta, nariz, boca, ojos, oídos. Antiséptica para la limpieza de heridas.
Romero Rosmarinus officinalis: Tónico estomacal, aperitivo, indigestión. Antiviral, ayuda a bajar fiebre. Revitalizante, tónico circulatorio. En su uso externo el alcohol de romero es útil en dolores reumáticos y como antiparasitário. No embarazo, obstrucción vias biliares.
Saúco Sambucus nigra: Antiviral, sudorífico (baja la fiebre), catarro, gripe, herpes, Afecciones osteoarticulares y reumáticas, gota. Cistitis. Uso externo en conjuntivitis, heridas purulentas. Precaución embarazo.
TomilloThymus vulgaris: Afecciones estomacales (indigestión, gastritis), intestinales (flatulencias, parásitos, diarrea) y respiratorias, catarro, gripe (baja la fiebre), tos,  bronquitis, (fluidifica el moco), faringitis, Antibiótico y antiviral, infecciones urinarias, Uso externo como deshodorante y en irrigaciones vaginales, enjuagues bucales, lavados oculares, alopecia. Tónico alchoholico para gota, reuma, contusiones. Precaución embarazo


  • Ante cualquier duda, consultar con un experto, antes de su administración oral o tópica.




26 de marzo de 2016

El cuerpo en los pies

La premisa de que existe una relación determinante entre las áreas de los pies y las partes del cuerpo es la que determina la reflexología podal. Mediante ésta técnica manual estimulamos los reflejos en los pies, con la finalidad de causar reacción en las correspondientes partes del cuerpo y de este modo recuperar el equilibrio. 

Se puede afirmar que todo el cuerpo humano está cubierto de puntos reflejos sobre los cuales es posible actuar para aliviar dolores y tensiones, existen además zonas en las cuales las concentraciones nerviosas son mayores, estas zonas se situan en las partes más periféricas del cuerpo; la cabeza, las manos y los pies.

La reflexología ya era conocida hace cinco mil años en la India y en China y se utilizaba con fines preventivos y diagnósticos. En Egipto, se han descubierto hallazgos arqueológicos (2330 a.C.) que contienen la representación de un masaje reflexológico plantar y palmar. 

Desde Egipto hasta nuestros días la historia de la reflexología no está muy clara, hay quienes sostienen que los mayas e incas ya la conocían puesto que las tribus indias de Norteamerica la venían utilizando desde siempre, según investigaciones del Dr. Harry Bond Bressier encontramos notícias aisladas relativas a esta masoterapia en todo tiempo y lugar. 


En Occidente, fue el Dr. William H. Fitzgerald quien publicó el primer libro en 1917 Terapia zonal, cómo aliviar el dolor en la propia casa, en el que describía sus éxitos en el alivio del dolor realizando una serie de presiones sobre puntos de las manos y los pies y trazó un mapa de estas zonas, a la par que elaboró una teoría según la cual se puede considerar que el cuerpo humano está atravesado por una retícula longitudinal que, partiendo de los dedos de la mano y del pie, se reúne sobre la coronilla. Dividió el cuerpo en diez bandas lineales, cinco en el lado izquierdo y cinco en el derecho, que recorren en sentido vertical el cuerpo y los pies vistos desde abajo, a estas líneas se las llama zonas y bajo ellas circula la corriente energética.

La obstrucción en las zonas energéticas se manifiesta como dolor, limitación de movimientos, alteraciones en la circulación sanguínea y linfática. Las toxinas van acumulándose en la planta del pie y sedimentándose en forma de pequeños cristales, cuando éstos cristales se rompen por la presión ejercida sobre el área, la sangre los remueve, permitiendo que la corriente energética alcance nuevamente el punto final de la extremidad del circuito, reestableciendo el equilibrio energético. El masaje reflexológico coopera con la fuerza vital propia del organismo para recuperar la salud

Los efectos de la reflexología podal

  • remueve los depósitos de toxinas, facilitando su eliminación.
  • actúa sobre las congestiones y bloqueos de los circuitos energéticos.
  • mejora la circulación sanguínea y linfática.
  • normaliza el funcionamiento de órganos y glándulas, activando o inhibiendo su actividad.
  • relaja cuerpo y mente, siendo muy recomendable para aliviar estados de estrés.
  • equilibra todos los sistemas del cuerpo.